WASHINGTON - El Banco Mundial anunció el jueves la aprobación de un paquete financiero de emergencia de 1,900 millones de dólares para ayudar a sus países miembros a afrontar los efectos de la pandemia de la enfermedad COVID-19 a través de una ventanilla de desembolsos rápidos.
El país más beneficiado por esta primera remesa de ayuda financiera es India, que recibirá mil millones de dólares, mientras que en Latinoamérica y el Caribe las naciones que accederán a esta financiación son Argentina, con 35 millones de dólares, así como Ecuador, Haití y Paraguay, cada uno de ellos con 20 millones.
Según un comunicado emitido por el Banco Mundial, su Junta de Directores Ejecutivos aprobó este primer paquete financiero de respuesta rápida al nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que beneficia en un total a 25 países, pero se aprobarán otras operaciones de manera que el grupo ascienda a más de 40 naciones.
Además, el Banco Mundial está trabajando en todo el mundo para redistribuir recursos en proyectos existentes financiados por la institución financiera por un valor de 1.700 millones de dólares, agregó el organismo.
El Banco Mundial aseguró que está preparado para desplegar hasta 160.000 millones de dólares en los próximos 15 meses para apoyar las medidas de combate a la COVID-19, además de ayudar a los países a responder a las consecuencias inmediatas para la salud de la pandemia y reforzar su recuperación económica.
"El programa económico más amplio tendrá como objetivo acortar el tiempo de recuperación, crear condiciones para el crecimiento, apoyar a las pequeñas y medianas empresas y ayudar a proteger a los pobres y vulnerables", aseguró el organismo.
Entre los países más beneficiados por esta primera emisión de créditos rápidos están Afganistán, con 100,4 millones de dólares, Pakistán con 200, Sri Lanka con 128,6 millones, Etiopía con 82,6, Kenia con 50, la República Democrática del Congo con 47,2, Ghana con 35, y Yemen con 26,9 millones.
"Habrá un fuerte enfoque de pobreza en estas operaciones, con énfasis en el financiamiento basado en políticas y en la protección de los hogares más pobres y el medio ambiente", aseguró el Banco Mundial.
El presidente del organismo, David Malpass, indicó en el comunicado que la institución ya financia operaciones de respuesta sanitaria a la COVID-19 en más de 65 países y que trabajan para fortalecer la capacidad de las naciones en desarrollo para responder a la pandemia y "acortar el tiempo de recuperación económica y social".
"Es probable que los países más pobres y vulnerables sean los más afectados, y nuestros equipos en todo el mundo siguen centrados en las soluciones a nivel nacional y regional para abordar la crisis", agregó.
El Banco Mundial también está ayudando a los países más desfavorecidos a acceder a suministros médicos fundamentales, comunicándose con los proveedores en nombre de los gobiernos, dijo.
La expansión global de la COVID-19 ya ha afectado a más de un millón de personas en todo el mundo y ha causado la muerte de más de 53.000 personas.