SIERRA VISTA, Arizona - En un camino de tierra al pie de las colinas salpicadas de arbustos de Arizona, Donald Trump usó un tramo de muro y una pila de vigas de acero para establecer un contraste visual entre su enfoque para asegurar la frontera y el de su oponente demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris.
Trump llevó a madres en duelo, al alguacil del condado Cochise y al jefe del sindicato de la Patrulla Fronteriza para hacer eco de su duro mensaje sobre seguridad fronteriza en la visita del jueves, cuyo tema fue "Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser seguro".
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"A mi derecha está lo que llamamos el muro de Trump. Este fue un muro que se construyó durante el gobierno del presidente Trump", dijo Paul Pérez, presidente del sindicato de la Patrulla Fronteriza. "A mi izquierda, tenemos lo que llamamos el muro de Kamala. Está ahí tirado sin hacer nada", indicó.
La visita fue la cuarta de una serie de eventos que se llevaron a cabo en estados en disputa esta semana para tratar de desviar la atención de la celebración de los demócratas por la nominación presidencial de Harris en Chicago. Los oradores de la convención el miércoles por la noche acusaron a Trump de usar la frontera para agitar a su base demonizando a los inmigrantes.
A la visita fronteriza del jueves se unieron las madres de niños que fueron asesinados durante el gobierno del presidente Joe Biden en casos en los que los sospechosos eran inmigrantes que se encontraban en el país ilegalmente.
Trump destaca con frecuencia los ataques que involucran a inmigrantes para alimentar las preocupaciones sobre las políticas de Biden, aunque algunos estudios han encontrado que las personas que viven en Estados Unidos ilegalmente tienen menos probabilidades que los estadounidenses nativos de ser arrestados por delitos violentos, de drogas y contra la propiedad.
"En realidad, quiero que todos tengan en cuenta lo importante que es el control fronterizo, porque estamos perdiendo a personas muy inocentes por crímenes atroces", dijo Alexis Nungaray, la madre de Jocelyn Nungaray, de 12 años, quien fue estrangulada hasta la muerte en Houston en junio.
En el evento de Arizona, los francotiradores se encontraban cerca, en una posición elevada, con los ojos y las armas apuntando hacia México, un día después de que Trump celebrara su primer mitin al aire libre desde un intento de asesinato el mes pasado. Las fuerzas de seguridad también eran visibles en el lado mexicano de la frontera, incluidos varios hombres con rifles y equipo táctico. Otros llevaban uniformes que los identificaban como miembros de la policía estatal mexicana.
"Lo que Biden y Kamala han hecho a las familias aquí conmigo y a tantas otras, miles y miles de otras, no solo las han matado, sino que también las han lastimado gravemente, las han lastimado gravemente hasta el punto en que nunca volverán a llevar una vida normal. Es vergonzoso y malvado", dijo Trump.