ARIZONA - La política tiene tiempos y formas, sobre todo en temporada de elecciones. El expresidente Donald Trump y el excandidato independiente Robert F. Kennedy Jr. eligieron Arizona para sellar su pacto político rumbo a las elecciones de noviembre.
Con la precisión requerida, Kennedy anunció la mañana de este viernes en un hotel del centro de Phoenix que suspendía su campaña para presidente y buscará eliminar su nombre de la boleta en los estados en disputa.
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Esto, debido a que cree que su presencia en la contienda ayudaría a la candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris.
Horas después, en el Desert Diamond Arena, de Glendale, Trump llevó a Kennedy al podio y le cedió la palabra para que diera su mensaje ante un escenario que vio desfilar entre otros políticos, a la candidata al Senado, Kari Lake.
Kennedy le dijo a la multitud que Trump quiere poner fin al control neoconservador sobre la política exterior estadounidense y terminar con la censura. Le preguntó a la multitud: "¿No quieren un presidente que haga que Estados Unidos vuelva a ser saludable?".
Trump llevó a Kennedy al escenario y lo recibió como una estrella de rock, con música de los Foo Fighters y la multitud coreando "USA".
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Con Kennedy de pie cerca en el escenario, Trump invocó al tío y padre asesinados del excandidato, John F. Kennedy y Robert F. Kennedy, y dijo: "Sé que están mirando hacia abajo en este momento y están muy, muy orgullosos de Bobby".
¿QUÉ SIGUE PARA ROBERT F. KENNEDY JR.?
Trump anunció que establecería una nueva comisión independiente sobre los intentos de asesinato presidenciales. Agregó que publicaría todos los documentos restantes relacionados con el asesinato de John F. Kennedy.
También indicó que, de ganar las elecciones, elegiría a Kennedy para liderar un panel, "que trabajará con Bobby" para investigar el aumento de los problemas de salud crónicos y las enfermedades infantiles, incluidos los trastornos autoinmunes, el autismo, la obesidad, la infertilidad y otros problemas.
El mitin de Trump en Glendale, Arizona, fue un evento conjunto con la organización juvenil conservadora Turning Point, que ha florecido con el auge del movimiento "Make America Great Again" (MAGA) del expresidente y se ha convertido en una fuente clave de apoyo de base para el candidato republicano.
El evento reflejó la impronta de la organización juvenil, con una producción de alta tecnología que incluyó luces estroboscópicas, música de estrellas de rock y pantallas LED que se alejan de la configuración típica de Trump.
Una larga fila de personas esperaba afuera con temperaturas de tres dígitos esperando para entrar, a pesar de que el evento estaba cerca de llenarse.
Se vio al menos a una persona siendo cargada en una ambulancia cerca del final de la fila mientras la gente esperaba sin sombra.