WASHINGTON — Una coalición inusual de jueces de la Corte Suprema de Estados Unidos votó el jueves en favor de un inmigrante que apela su deportación, en una causa que el tribunal dijo que se decidió por el significado de la palabra “una”.
Por votación de 6-3, la Corte falló en favor de Agusto Niz Chávez, un guatemalteco que ha estado en Estados Unidos desde 2005.
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Ocho años más tarde, recibió una notificación para que compareciera en una audiencia de deportación, pero el aviso no contenía fecha ni hora. Dos meses más tarde, recibió una segunda notificación que le instruía cuándo y dónde presentarse.
EL GUATEMALTECO HA ESTADO EN EEUU DESDE EL 2005
Al enviar una notificación de una audiencia de deportación, el gobierno puede detener el reloj para los inmigrantes que esperan poder mostrar que han estado en el país durante al menos 10 años consecutivos.
Los 10 años hacen más fácil bajo la ley federal que un inmigrante pida que se le permita quedarse en el país.
La Corte tuvo que decidir si las autoridades de inmigración tenían que incluir toda la información pertinente en una sola notificación.
Inmigración
El juez Neil Gorsuch, en la opinión de la mayoría, escribió que sí y criticó el sistema del gobierno de “notificaciones por entregas”.
Otros dos jueces conservadores, Clarence Thomas y Amy Coney Barrett, coincidieron, como lo hicieron también los tres miembros centroizquierdistas de la Corte, Stephen Breyer, Elena Kagan y Sonia Sotomayor.
La causa fue debatida en noviembre, durante el gobierno de Trump.
“Cualquier persona que ha solicitado un pasaporte, prestaciones del Seguro Social o una licencia (de conducción) entiende la afinidad del gobierno por los formularios ¿Cometes un error o te saltas una página? Comienza de nuevo, a veces con una penalización. Pero resulta ser que el gobierno federal también encuentra exasperantes algunos de sus formularios”, escribió Gorsuch.
Una ley de inmigración de 1996 especifica “una notificación para comparecer” para las personas que el gobierno quiere deportar, dijo Gorsuch.
“A primera vista, una notificación parecería ser solamente eso: un solo documento que contenga toda la información que un individuo necesita saber sobre su audiencia de deportación. Sin embargo, dice el gobierno, suministrar tanta información en un solo formulario es muy agotador. El gobierno dice que necesita más flexibilidad para permitirles a sus funcionarios que provean la información en envíos separados (todos los que deseen) a lo largo del tiempo (siempre que les parezca conveniente)”, escribió.
Gorsuch reconoció que parecía que mucho dependía de una sola palabra, pero dijo que el papel de la Corte es asegurarse de que la rama ejecutiva no excede el poder que le da el Congreso.
“Interpretar la frase ‘una notificación para comparecer’ para requerir una sola notificación —en lugar de 2 o 20 documentos— hace precisamente eso”, escribió.
En la disensión, el juez Brett Kavanaugh —nombrado por Trump, al igual que Gorsuch y Barrett— dijo que la conclusión de Gorsuch era “sumamente desconcertante como interpretación de los estatutos y el sentido común”.
Kavanaugh apuntó que Niz Chávez tuvo una notificación adecuada porque se presentó en su audiencia con un abogado. “Niz Chávez recibió toda la información requerida, incluso la hora y el lugar de su audiencia”, escribió Kavanaugh, en una opinión respaldada por los jueces John Roberts y Samuel Alito.
Recibir la primera notificación sin una fecha para la audiencia “le permite al no ciudadano más tiempo para preparar una defensa. Y un no ciudadano no se perjudica por recibir notificación en dos documentos en lugar de en uno, como lo demuestra claramente el caso de Niz-Chávez”, escribió Kavanaugh.
No es la primera vez que Gorsuch y Kavanaugh, dos exsecretarios judiciales del ahora retirado juez supremo Anthony Kennedy, están en lados opuestos en una causa.
El año pasado, Gorsuch escribió la opinión de la Corte de que la ley federal prohíbe la discriminación en el lugar de trabajo contra personas LGBTQ. Kavanaugh disintió.