El presidente explicó por qué está dispuesto a reunirse con republicanos para solventar el problema migratorio.
EL PASO, Texas- El presidente Joe Biden hará el domingo su primera visita a la frontera entre Estados Unidos y México desde que asumió el cargo, según funcionarios de la administración.
Biden visitará El Paso, Texas, para "abordar las operaciones de aplicación de la ley fronteriza y reunirse con funcionarios locales", dijeron los funcionarios el jueves.
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Funcionarios de alto rango del Gobierno estadounidense indicaron este jueves en una rueda de prensa telefónica que durante su visita el mandatario pretende "abordar las operaciones de aplicación de la ley" y se reunirá con funcionarios locales.
El mandatario visitará El Paso antes de visitar México el lunes y el martes para reunirse con su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, en su primer viaje al país vecino del sur y a una nación latinoamericana desde su llegada a la Casa Blanca.
ANUNCIAN CAMBIOS MIGRATORIOS PREVIO A LA VISITA
Los planes de Biden de visitar la frontera fueron revelados justo antes del discurso programado del presidente en la Sala Roosevelt de la Casa Blanca para revelar un nuevo programa humanitario de "libertad condicional" para migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, dijeron los funcionarios de la administración.
Estados Unidos aceptará hasta 30,000 migrantes por mes de esas naciones en una estrategia fronteriza que se combinará con el uso ampliado de las expulsiones del Título 42. Reflejará la última aventura de su administración para combatir un aumento de la migración que ejerce presión sobre el sistema de inmigración de Estados Unidos.
La nueva política, con efecto inmediato, sigue el modelo de la que se implementó únicamente para los venezolanos este otoño, que creó un camino estrecho para hasta 24,000 migrantes que tienen vínculos preexistentes en los Estados Unidos, y personas que podrían proporcionar apoyo financiero y de otro tipo. La implementación del programa, que se ocupa de los países que enfrentan agitación política y económica, depende del uso de la autoridad del Título 42 para rechazar a aquellos en la frontera entre Estados Unidos y México que no califican.
Los agentes fronterizos ya han rechazado a masas de venezolanos que usan la autoridad del Título 42 en los últimos meses, y ahora harán lo mismo con los cubanos, haitianos y nicaragüenses. México ha acordado aceptar 30,000 migrantes por mes de los cuatro países, según los funcionarios de la administración.
Los migrantes que crucen ilegalmente a Panamá o México también serán considerados inelegibles para el programa, en un intento por desalentar a las personas de emprender el peligroso viaje a través del Tapón del Darién.
EL DILEMA EN LA FRONTERA
El dilema fronterizo se ha intensificado para el gobierno Biden en las últimas semanas a medida que los funcionarios se preparaban para un final ordenado por la corte de los límites del Título 42, solo para ver a la Corte Suprema bloquear temporalmente el levantamiento de la política. Pero independientemente del destino de la política de la era Trump, que será decidida por el tribunal superior a finales de este año, la frontera sur enfrenta una afluencia migratoria récord que probablemente seguirá siendo un tema político clave durante la presidencia de Biden.
Junto con vías legales adicionales y disuasión, el gobierno continúa su preparación para el fin de los límites del Título 42, dijeron los funcionarios. La administración está trabajando para contrarrestar los cárteles y las redes de tráfico de personas, al tiempo que aumenta recursos como personal, transporte, apoyo médico e instalaciones para apoyar a los funcionarios fronterizos. Biden también pedirá el jueves al Congreso que cumpla con su solicitud de financiamiento de recursos adicionales y que los legisladores aprueben una reforma migratoria integral.
"También escucharán al presidente reiterar hoy que el Congreso tiene que hacer más", dijo un funcionario de la administración. "Es solo un hecho que años de inacción del Congreso y las políticas destructivas de la administración anterior han creado un sistema de inmigración que no sirve a nuestros intereses nacionales".
El secretario del Departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, también ofrecerá una conferencia de prensa este jueves para hablar sobre los planes para expandir el procesamiento del Título 8 para los migrantes que no son elegibles para ser expulsados bajo el Título 42. El Título 8 permitiría al gobierno expulsar rápidamente del país a cualquier persona que no pueda establecer una base legal, como una solicitud de asilo aprobada. Estos migrantes estarían sujetos a una prohibición de reingreso de cinco años.
