MIAMI, Florida - Robert Koehler, el presunto "violador de la funda de almohada", testificó por primera vez en una corte del sur de Florida y se declaró inocente de agresión sexual.
Sin embargo, los investigadores que le siguen la pista desde la década de 1980 consideran que es el autor de decenas de violaciones. “Aterrorizó a mujeres a través de todo el sur de la Florida, cometió asaltos sexuales en toda la zona”, dice la fiscal de Miami-Dade, Katherine Fernández-Rundle.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email.> Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo Arizona aquí.
La versión del acusado, quien ahora tiene 63 años, es muy diferente. En corte, Koehler afirmó que había sido secuestrado, drogado y torturado por personas que, según dijo, eran policías corruptos.
Contó que los secuestradores colocaron un dispositivo de rastreo en su brazo y que frente a él mataron a un hombre y a una mujer.
En otro momento de su relato, aseguró que se despertó desnudo y que los hombres tenían a una niña atada de 4 a 6 años y agregó que lo obligaron a dispararle.
Koehler dijo que la evidencia fue plantada en la escena del crimen y que supuestos policías le habían dicho que necesitaban a un culpable para poder justificar más presupuesto.
¿POR QUÉ SE LE LLAMA EL VIOLADOR DE LA FUNDA DE LA ALMOHADA?
En los años de 1980, la policía recurrió a dibujos, volantes y hasta una escultura para tratar de identificar al sujeto que atemorizaba a las mujeres en el sur de Florida.
"Me dijo que buscara la funda de la almohada para que me cubriera la cabeza", declaró una de las posibles víctimas en ese momento.
Koehler quedó en el ojo de los investigadores luego que su hijo ingresara su ADN a una base de datos y era muy similar al del violador en serie. Detectives siguieron al ahora acusado en un supermercado y recuperaron una toallita con la que limpió su carro de compras, tomaron la muestra de ADN y la compararon con la que se había recuperado de las escenas.
La fiscal estatal de Miami-Dade dijo que “con una orden de la corte pudieron sacar ADN de la boca del padre”. Fue así como en enero de 2020, la fiscal estatal concluyó que estaban seguros de que era el acusado.