Testigo dice que “El Chapo” pagó $100 millones a Peña Nieto

El narco supuestamente pagó en octubre de 2012 un soborno al expresidente de México.

Joaquín “El Chapo” Guzmán pagó un soborno de $100 millones al expresidente mexicano Enrique Peña Nieto, dijo el martes un narco colombiano al testificar en el juicio a Guzmán que se celebra en Brooklyn.

El envío de dinero lo hizo una mujer conocida como Comadre María en Ciudad de México en octubre del 2012, señaló. En ese momento Peña Nieto era presidente electo.

El colombiano Alex Cifuentes testificó que en 2016 les explicó a funcionarios del gobierno estadounidense más de una vez que ese pago ocurrió. Dijo que Guzmán era quien se lo había explicado. Sin embargo, en otra sesión del interrogatorio ocurrida en el 2018 Cifuentes dijo que no tenía tan claras cuáles habían sido las cifras.

Un portavoz de Peña Nieto, quien dejó el cargo a finales de 2018, ha dicho en el pasado que el tema de los sobornos es falso. Miguel Ángel Osorio Chong, coordinador de la bancada del PRI en el Senado y exsecretario de gobernación durante el mandato de Peña Nieto, dijo lo mismo a un medio radial el martes por la tarde, además de cuestionar que se dé tanto valor a las palabras de delincuentes.

Cifuentes también dijo que Guzmán le explicó que Peña Nieto había contactado al narcotraficante mexicano. El abogado de Guzmán, Jeffrey Lichtman, le preguntó si el mensaje que le mandaba el presidente electo a Guzmán era que ya no necesitaba esconderse más.

“Sí”, dijo Cifuentes. “Eso mismo es lo que me dijo Joaquín”

Lichtman entonces le preguntó que si lo que quería el gobierno mexicano era dinero por parte de “El Chapo”.

“Trabajar con él, sí”, respondió Cifuentes.

“Cuando dice trabajar, ¿quiere decir que Guzmán paga y Enrique Peña Nieto le permite seguir trabajando?”, preguntó Lichtman.

“Me imagino que sí”, dijo Cifuentes.

Lichtman explicó después que Cifuentes llegó a decir al gobierno estadounidense que Peña Nieto había pedido en realidad $250 millones a Guzmán pero que “El Chapo” ofreció $100 millones.

“Así es, pero quizás estoy confundido con los números”, respondió Cifuentes.

Durante el intercambio los fiscales estadounidenses objetaron a menudo y el juez Brian Cogan aceptó algunas objeciones y negó otras. Peña Nieto fue presidente de México desde el 2012 hasta el año pasado, por lo que fue testigo de la captura de Guzmán en el 2016 y su extradición a Estados Unidos en el 2017.

Por otro lado, Lichtman mencionó a la empleada del cartel de Sinaloa, Andrea Vélez, y dijo que ésta trabajaba también para J.J. Rendón, un consultor político que laboraba en la campaña electoral de Peña Nieto. Cifuentes dijo que Vélez le envió fotos de maletas llenas de dinero en Ciudad de México.

En otras explosivas declaraciones del martes, Cifuentes dijo que Guzmán pagó dos o tres veces entre $10 millones y $12 millones al ejército mexicano para que mataran a miembros del cartel rival de los Beltrán Leyva. También explicó que él mismo trabajó con la policía federal mexicana, con permiso de Guzmán, para importar cocaína desde Argentina a México. Cifuentes explicó que los propios agentes de la policía mexicana recogían las maletas llenas de droga en el aeropuerto porque tenían el número de vuelo y fotos de ese equipaje.

“El Chapo”, uno de los narcotraficantes más conocidos y ex líder del cartel de Sinaloa, se ha declarado inocente de supuestamente acumular una fortuna multimillonaria a través del tráfico de toneladas de cocaína y otras drogas desde México a Estados Unidos. De ser encontrado culpable enfrentaría una posible sentencia a cadena perpetua. Guzmán enfrenta 11 cargos, que incluyen tráfico de drogas, tráfico de armas, lavado de dinero y participación en empresa criminal.

Cifuentes, de 50 años, fue arrestado en México en el 2013 y extraditado a Estados Unidos en el 2016. El colombiano vivió con Guzmán en la sierra de Sinaloa desde 2007 a 2009 y después en casas de “El Chapo” en las montañas hasta su arresto en 2013.

El testigo colombiano no fue claro el martes cuando se le preguntó si los Beltrán Leyva pagaron al expresidente Felipe Calderón para protegerles ante el cartel rival de Sinaloa. Cifuentes dijo que no recordaba eso.

Al principio del juicio Lichtman dijo al jurado que escucharía sobre sobornos a Peña Nieto y Calderón y sugirió que Guzmán fue víctima de las conspiraciones de funcionarios del gobierno y traficantes rivales. Calderón desestimó las acusaciones de sobornos al calificarlas de falsas y el martes destacó en Twitter las palabras de Cifuentes cuando éste dijo que no recordaba el tema.

El martes por la mañana, el testigo dijo que Guzmán intentó ofrecer $10 millones en 2013 al “general de la nación” en México, quien supuestamente rechazó la oferta porque “odiaba mucho a Joaquín”.

Cifuentes dijo que Guzmán vio la oportunidad de sobornar al general cuando Vélez, la empleada del cartel, le dijo que tenía acceso al militar, descrito tan sólo por Cifuentes como “general de la nación”. Vélez era dueña de una agencia de modelos en Ciudad de México, dijo Cifuentes, y le presentaba las mujeres al general en fiestas privadas que ocurrían los miércoles.

El testigo explicó que Guzmán aprovechó para pedirle a Vélez que le ofreciera al general los $10 millones “para que lo dejara en paz”. Si el general aceptaba la oferta Guzmán se comprometía a pagarle un millón de dólares a Vélez. La empleada del cartel, sin embargo, no tuvo éxito. Cifuentes dijo que el general odiaba a Guzmán.

“El Chapo” se enojó, dijo Cifuentes, la llamó mentirosa y ordenó que la mataran.

Vélez ha sido descrita en el juicio como amiga y secretaria de Cifuentes, a quien ayudó a traficar droga del cartel de Sinaloa. Sin embargo, la empleada del cartel empezó a colaborar de forma secreta con las autoridades estadounidenses en 2012 y fue trasladada a Estados Unidos “debido a una amenaza”.

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