Un hombre de Florida condenado por matar a un estudiante universitario de primer año y violar a su hermana mientras acampaban en un bosque nacional hace 30 años fue ejecutado este jueves.
Loran Cole recibió una inyección letal y fue declarado muerto a las 6:15 pm del Este en la prisión estatal de Florida en Raiford, cerca de Jacksonville, por el asesinato de 1994. Cole también cumplía dos cadenas perpetuas por violación. Sú última comida fue pizza y helado.
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Según los registros judiciales, Cole y un amigo, William Paul, se hicieron amigos de los dos estudiantes universitarios en el Bosque Nacional de Ocala. Después de hablar alrededor de una fogata, los hombres se ofrecieron a llevar a los hermanos a ver un estanque. Mientras estaban fuera del campamento, Cole y Paul se abalanzaron sobre las víctimas y las robaron.
Al hermano, de 18 años, que era estudiante de la Universidad Estatal de Florida, le golpearom, le cortaron la garganta y lo dejaron en el bosque. A su hermana, de 21 años y estudiante de último año en el Eckerd College, fue llevada de regreso al campamento, donde Cole la ató y la violó.
La mujer quedó atada a un árbol durante la noche y fue violada nuevamente al día siguiente. Finalmente logró liberarse y hacer señas a un conductor para que la ayudara. La policía encontró el cuerpo de su hermano boca abajo en el suelo, según los registros judiciales.
El gobernador Ron DeSantis firmó la sentencia de muerte para Cole el mes pasado.
Los abogados de Cole, de 57 años, plantearon varios puntos en su apelación, incluido el hecho de que Cole era un recluso en una escuela de reforma estatal donde él y otros niños fueron golpeados y violados. Desde entonces, el estado se disculpó por el abuso y este año aprobó una ley que autoriza reparaciones para los reclusos en la escuela de reforma ahora cerrada.
Los abogados de Cole también argumentaron que no debería ser ejecutado porque sufre daño cerebral, es paciente de salud mental y tiene la enfermedad de Parkinson.
La Corte Suprema del estado rechazó los argumentos de la defensa.
Paul y Cole fueron condenados por asesinato en primer grado. Paul fue sentenciado a cadena perpetua.
La ejecución fue la primera en Florida desde que Michael Zack fue ejecutado en octubre pasado por el asesinato de Ravonne Smith en 1996.