WASHINGTON DC - Congresistas republicanos votaron este miércoles y eligieron a Mike Johnson como el presidente número 56 de la Cámara Baja de EEUU, esto tras nominarlo el martes como su cuarto candidato.
Johnson, quien ya prestó juramento, tiene mucha menos experiencia que los oradores anteriores, ya que fue elegido por primera vez en 2017. Según un análisis de NBC de los últimos 100 años, el tiempo promedio en la Cámara antes de ser elegido presidente es de 21.9 años.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email.> Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo Arizona aquí.
Es un ascenso sorprendente para el aliado conservador de Donald Trump y miembro de bajo rango del equipo de liderazgo del Partido Republicano que ahora ocupa el segundo lugar en la línea de sucesión a la presidencia.
Johnson es posiblemente la persona ideológicamente más conservadora que ha servido como presidente desde Newt Gingrich en la década de 1990, y jugó un papel fundamental en el esfuerzo del Partido Republicano por anular las elecciones de 2020.
Después de semanas de desorden, el Partido Republicano demostró una unidad notable: los 220 republicanos votaron por Johnson, mientras que los 209 demócratas votaron por el líder de la minoría Hakeem Jeffries de Nueva York.
Johnson, de Luisiana, es miembro del liderazgo republicano de la Cámara de Representantes y es un abogado especializado en cuestiones constitucionales que había unido a los republicanos en torno al esfuerzo legal de Trump para anular los resultados de las elecciones de 2020.
La nominación ocurre después de que el republicano Tom Emmer, de Minnesota, retirara el martes su candidatura horas después de ser nominado por sus compañeros de banca, quienes tienen la mayoría.
Tras su retirada, se abrió un nuevo plazo para solicitar la candidatura en la que se presentaron seis congresistas, entre los que estaban Mike Johnson, Byron Donalds y Kevin Hern, quienes quedaron cerca de Emmer en la anterior votación.
El cargo de "speaker", como se conoce en inglés al presidente de la Cámara, está vacante desde que el también republicano Kevin McCarthy fue destituido el 3 de octubre tras una moción del ala más dura del partido.
Desde entonces, Emmer fue el tercer nominado de los republicanos a presidir la institución que fracasa por fractura interna del Partido Republicano.
El congresista Steve Scalise fue nominado pero nunca llegó a someterse a una votación en el pleno por falta de apoyos.
Jim Jordan, quien lo sucedió como candidato, se retiró el viernes de la contienda tras perder en el pleno tres votaciones en las que varios legisladores de sus propias filas le dieron la espalda.
Según reporta NBC News, McCarthy estaba impulsando un plan para recuperar la presidencia, con Jim Jordan como asistente a la presidencia, de acuerdo a tres fuentes.
Los republicanos tienen en la Cámara Baja una estrecha mayoría de 221 escaños frente a los 212 de los demócratas, por lo que el aspirante a presidente no puede permitirse perder más de cuatro votos de sus propias filas.
Hasta que no se elija a un nuevo presidente de la Cámara Baja no se pueden aprobar nuevas resoluciones o proyectos de ley en un momento en que está en el aire la aprobación de nueva ayuda militar para Ucrania e Israel.
Los demócratas critican que los conservadores han convertido el Legislativo en un circo.